Sueño.

Regularmente no soy de los que recuerda lo que soñó la noche anterior, es mas a veces no estoy seguro si es que los tuve. Por lo general, caigo literalmente muerto a la cama y al día siguiente sufro amnesia matutina (creo que acabo de inventar una nueva enfermedad).


Hoy fue la excepción.

Hoy si logre acordarme…

De niño solía tener sueños recurrentes.

En ellos siempre había un anciano persiguiéndome.

Su simple presencia me causaba pánico.

No importaba donde me encontrara, si en el supermercado, en el cine, en la calle jugando con mis amigos, en una fiesta arriba de un brincolin o en la escuela.
Siempre de una u otra forma el viejo aparecía, por lo que automáticamente tenía que dejar lo que estuviera haciendo y salir huyendo.

Por unos cuantos años ignore el motivo de su persecución.

No sabía si quería solo decirme algo o de plano matarme.

Siempre estuvo ahí, desde que tengo memoria hasta el día en que tome la decisión de enfrentarlo y preguntarle quien era.

Solo dijo: -¡Soy el Diablo!- Mientras sujetaba un cuchillo carnicero en la mano.

Inmediatamente desperté.

Esa fue la última vez que el anciano estuvo en mis sueños.

Lo curioso es que anoche tuve uno similar.

No tuve tiempo, pero debí de haberle puesto unos chingazos.

Ya no le temo, pero luego me podria echar al “Club de la Alegría” como enemigos.

Mas de 8 años y ahora aparece de nuevo.

El Anciano Contraataca.